Tanto el escudo de armas que aparece en la bandera italiana que rigió hasta 1946, cuando se abolió la monarquía, como en el estandarte real que se usó desde 1880 (también hasta 1946), el azul es protagonista. Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, es un gran aficionado al fútbol y, como argentino, es un fiel seguidor y socio del San Lorenzo de Almagro, pero en privado ha confesado en algunas ocasiones su admiración por el Real Madrid. Una marcha fúnebre partía del centro hasta el cementerio de San Cassiano, donde se encuentra la cripta que contiene los restos de Mussolini. Un agente metió su cabeza gorda en el coche ante mis requerimientos, y cuando se enteró de que pretendía llegar al estadio en hora, se le congestionó la cara y rompió a reír como si le hubiese pedido mesa en Dorsia. El equipo giallorossi también vivió uno de los mejores períodos de su historia en esos años (cinco Copas de Italia y un título de Serie A entre 1979 y 1991), con jugadores como Falcao, Toninho Cerezo, Carlo Ancelotti y, uno de los grandes mitos romanistas, Bruno Conti. Un relato narrado a través de 45 piezas que constituyen los fotogramas más significativos de esa película que son los 45 años de la marca italiana que ha contribuido a escribir la historia del deporte.
Es el tercer Mussolini de su generación que decide lanzarse a la política. Tajani vino a decir que las ‘cosas buenas’ que hizo Mussolini y ser antifascista no es contradictorio. Le idiozie che continuano a circolare sul fascismo, un libro que pretende terminar con los mitos equivocados que circulan sobre esta etapa. Alababan los tiempos del fascismo, que creen que siempre fueron mejores. La indignación generada le hizo retirar estas palabras, pedir disculpas, prometer que es un antifascista “convencido” y que Mussolini representa “la página más oscura de la historia de Italia”. En Italia no lo hicimos porque había la necesidad de pasar página muy rápido, y esto hace que todavía hoy el espíritu de Mussolini siga presente”, considera Filippi. Ahora, con el Juventus en Segunda división, castigado por fraude deportivo, continúa siendo la bandera de su equipo, en el que se quedó cuando otros se marcharon por la pérdida de categoría. Hace unas pocas semanas, su bisnieto, Caio Giulio Cesare Mussolini, anunciaba su candidatura a las elecciones al Parlamento Europeo por Hermanos de Italia, un partido ultraderechista al que votan algunas de las personas que se reunieron en Predappio.
Pero quizás la mayor polvareda la levantó el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, que incendió la opinión pública diciendo que el Duce también hizo cosas buenas. El nombre de Mussolini en Italia es un fantasma que nunca se ha evaporado del todo, pero en los últimos meses ha estado más presente en las conversaciones mediáticas. AS Colombia unos meses atrás. En 2008 desafío al gusto de Luis Aragonés y vistió con un dorado que se acercaba a su temido amarillo. En algunos quioscos de Roma, en diciembre se podía encontrar un calendario dedicado a la figura del dictador fascista, que costaba casi 10 euros y que, según los vendedores, tenía más éxito que nunca. Venden desde bustos del dictador a mecheros, botellas de vino con su nombre, el Mein Kampf en italiano o camisetas que rezan algunos de los eslóganes de sus seguidores, como “ Per un mondo più pulito, torna zio Benito” (para un mundo más limpio, vuelve tío Benito) o “ Me ne frego! Su casa natal ahora es un museo que cobra entrada para ver una exposición sobre la escuela fascista. El edificio era antes una escuela.
Matteo Salvini, ministro del Interior y líder de la Liga, pedía ayer la reintroducción del babi en las escuelas para imponer “orden y disciplina”, una medida polémica porque tradicionalmente en Italia se asocia al uniforme de la escuela fascista. Es una paradoja que se encuentra en el hecho de que después de la guerra no sólo en Italia, en toda Europa, se tendió culpar de todos los desastres a los nazis, a los alemanes. «baloncestera», al igual que la de los Warriors o cualquiera de estas de manga corta. No obstante, aunque no exista ningún código de vestimenta actualmente, «como diputado, igual que como empleado de una compañía, representas a un partido concreto y a un segmento de votantes, así que lo lógico sería llevar un código de vestimenta que represente al segmento que se representa», afirma Esther Carrera, Senior Director de PageGroup. Es una manera de hablar que se escucha todavía en las casas de algunos italianos. Esther Carrera, «los directivos de las compañías son los primeros que llevan un look más casual y con ello se logra que el ambiente de trabajo pueda ser más distendido y cercano y que la gente pueda expresar su personalidad de una manera más abierta. Esto es especialmente visible en el entorno tecnológico y digital, así como en empresas del sector industrial, healthcare y gran consumo. Continua habiendo sectores más clásicos, como el de Banca, Legal o Consultoría, que siguen con un código de vestimenta tradicional. E incluso por regiones vemos diferencias, Barcelona es la plaza donde se utiliza un dress code más relajado».